Riojanos, vascos, castellanos, asturianos, navarros, cántabros, sevillanos y ¡cómo no! aragoneses. ¡¡Ahí estaba Monkayak!!
Monkayistas y acompañantes nos hemos levantado temprano para viajar a Logroño y competir en la emocionante jornada de piragüismo y SUP. Con muchas ganas e ilusión, y con el madrugón casi olvidado, llegamos al embarcadero de Logroño sobre las 9:30 h, con puntualidad británica.
Como de costumbre, con la colaboración Monkayista, ayudando desde los más pequeños a los más veteranos y siguiendo la batuta de técnicos experimentados , descargamos el material.
Los técnicos del club hicieron un gran trabajo organizando la logística del viaje y el entrenamiento de todos, asegurándose de que todos estuvieran en las mejores condiciones para competir, tanto físicamente, como motivacionales, desde los más veteranos hasta los más peques. Se vaticina una competición con mucho ánimo!
Comenzó la contienda a las 11 , K1, seniors y veteranos, como siempre, salieron como cohetes a darlo todo, ya que en este caso no fue necesario “quitarse las algas de la punta”. Listos… ya!, salida explosiva, buscando la posición, siguiendo la ola adecuada, tirando de cintura, brazo…. A tope! Adrenalina en estado puro!!!
En segunda salida les tocaba a nuestros chavales, la cantera, con mucha ilusión por participar, la marea roja en talla “S”, tras vencer la corriente del rio y colocarse en la línea de salida , han paleado como leones para comerse el rio y a lo que se pusiese por delante. Nervios antes de la salida, con alguna visita que otra al WC…. Durante la regata, tras empezar la fiesta… caras de esfuerzo se alternaban con sonrisas entre compañeros y amigos de equipo, tensión técnica y ritmo para dar lo mejor de ellos mismos.
En la salida final, SUPEROS de todas las partes se median con kayakistas de cadetes. SUPEROS perfectamente posicionados, con sus tablas alineadas, los leash, perfectamente anclados, quillas fuertemente ancladas, Monkayistas y los hermanos de SUP ZARAGOZA, defendieron los colores como leones, sobrepasando a rivales muy duros y arrebatando segundos regata tras regata a otros grandes palistas.
Tras las regatas, los deportistas descubrieron que las duchas no estaban disponibles. Aunque esta situación podía haber sido incómoda, los miembros del club se lo tomaron con humor y se rieron de la situación. Pero cuando llegó el momento de regresar a casa, el olor a regata en los coches se convirtió en una anécdota más para contar en el club.
Después de recoger entre todos el material, nos fuimos todos a comer de picnic en la arboleda que había junto a la entrega de premios. Como siempre, el buen rollo y los comentarios sobre la regata nos acompañaron, contando anécdotas y echando risas.
Pero había que volver a casa, el día siguiente era "día de escuela", así que emprendimos el camino hacia Zaragoza, satisfechos y contentos de seguir construyendo equipo y sintiendo un profundo orgullo de pertenencia a esta gran MAREA ROJA!
El año próximo...¡¡volveremos a Logroño!!
Laura, María y Luis
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