Muchos de los que formamos hoy el Monkayak Hiberus no tuvimos la suerte de conocer a Enrique personalmente, pero tenemos que saber que es parte importante de nuestra historia. Fue socio fundador del "Club Piragüista Hiberus", que un tiempo más tarde se fusionaría con el "Monkayak". De ahí proviene el actual nombre del club: Monkayak Hiberus.
Este es el quinto año que se organiza un descenso en su memoria. Un gesto sencillo que nos permite reunirnos con su familia y amigos y participar en algo que a él le hacía feliz.
Y aunque no quiso acompañar mucho la mañana, pues el día estaba fresco, nublado y ventoso, el espíritu monkayista hizo que esto no fuera inconveniente y el descenso se convirtió en una agradable jornada de convivencia que llenó de alegría las aguas del Ebro.
Después nos reunimos todos a comer y no faltaron las risas y las anécdotas sobre Enrique... Sonia, su mujer, nos dijo que Enrique "se sentiría feliz y orgulloso si pudiera ver en lo que se ha convertido el Monkayak Hiberus'". Creo que es el mejor homenaje que le podemos hacer.
Gracias Sonia, familia y amigos por estar ahí y hacer de este día una excusa para el reencuentro y los buenos momentos. Y sobre todo gracias a ti, Enrique.
Autora: Sonia Sola
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