El fin de semana del 19 y 20 de agosto,
tuvo lugar el XX Descenso Internacional del Cinca. Otro año más, los
monkayistas nos desplazamos hasta Mequinenza para participar en la que
posiblemente sea, la regata más divertida del año.
Llegamos al pantano sobre las once de la
mañana y nos metimos a rodar un poquito. Había que comprobar que los
barcos no habían sufrido en el traslado y tomar un poco de contacto con el agua.
De allí al albergue, donde siempre nos
tratan de maravilla y donde la “tribu monkayista” se siente como en casa. Había
que comer rápido puesto que los benjamines, alevines e infantiles, participaban
en la
Regata Jóvenes Promesas
2017. La participación de los más jóvenes del club fue espectacular. Dieron
toda una lección de deportividad, esfuerzo, superación y constancia, subiendo
casi todos ellos al podium y elevando al club a un séptimo puesto en la
clasificación general.
Una vez finalizada la
regata nos fuimos al acto de inauguración oficial del XX Descenso Internacional
del Cinca, que este año se hermanaba con el Sella. Fue un momento muy emotivo
con rondalla y vertido de agua del río asturiano en el aragonés. Después de un
ágape fantástico, regresamos al albergue, ya que había que descansar porque al
día siguiente prometía ser duro y exigente.
Por
la mañana los nervios se sentían en el comedor. Todo el mundo hablaba sobre el
caudal del río, la mejor forma de pasar la “lavadora” o la probabilidad de
romper la embarcación antes de llegar a la meta, pero esto es el Monkayak y si
algo tenemos claro es que el Cinca… NOS ENCANTA, así que las ganas de disfrutar
del río y divertirnos, puede con todo lo demás.
Ya en Fraga preparación
de embarcaciones y charla al grupo antes del Descenso, recordando que lo más
importante es dar lo mejor de nosotros mismos y sobre todo, sobre todo,
disfrutar y divertirse.
Entre las
modalidades de competición y popular, cincuenta participantes del club
surcarían esa mañana las aguas del río Cinca. Un minuto de silencio por las
víctimas de Barcelona. Consternación y tristeza en los momentos previos a la
salida.
¡Al agua! Por
fin se oye la señal y el río se tiñe de un sinfín de colores. Cientos de
piraguas avanzan intentando tomar las mejores posiciones… el espectáculo es
impresionante.
Diez minutos más tarde tomarán la salida
los participantes en la modalidad popular, donde una vez más, nuestro equipo
realizó un excelente trabajo con el atuendo que este año estaba dedicado a la
película Monstruos, S.A.
Después de 19 intensos kilómetros, todo
el mundo llegó a la meta con una gran sonrisa y la satisfacción de haber
concluido la prueba.
Pero
todavía nos quedaba una sorpresa. Llegaron las clasificaciones y numerosos
miembros del club subían al podium. Al final de la entrega de trofeos, el
presentador anuncia que se va a dar paso a otorgar el premio a los tres mejores
clubes de la regata. Terceros, segundos y el primer lugar es para… ¡¡¡EL CLUB
MONKAYAK HÍBERUS!!! Estallido de alegría y emoción entre los presentes.
Abrazos, sonrisas, enhorabuenas y muchos gestos de complicidad… esto
es nuestro club, esta es la grandeza de nuestro club, la calidad humana, el
esfuerzo conjunto, el entendernos todos como una gran unidad con sus diferentes
individualidades. Solo quien es consciente del lugar en donde está, es capaz de
fijarse unos objetivos para avanzar. Y eso es lo que hacemos y lo hacemos todos
juntos, todos remando en la misma dirección, porque es la única forma de
conseguir grandes logros.
Otro año más.
Otro Cinca terminado con multitud de experiencias, de anécdotas que contar, con
amistad, con compañerismo… con la inmensa alegría de quien disfruta de lo que
más le gusta, de la mejor manera posible: con los suyos.
Autora: Mamen Pelegrín
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